Se dice que la videncia es, la facultad que tenemos algunas personas con una “sensibilidad especial” de percibir cosas o situaciones ocultas. Es muy importante tener en cuenta que la videncia no es un juego de niños, por eso, no se puede utilizar cuando y como queramos.
Desde mi humilde experiencia puedo deciros que, la Videncia es un Don Natural que no se debe frivolizar con él. Las personas que la tenemos hemos atravesado por momentos duros desde la niñez, hemos recibido muchas bofetadas sin explicación. No se trata para nada, de cerrar los ojos y adivinar. La clarividencia va mucho más allá y por supuesto no la podemos controlar a nuestro antojo. Las visiones que tenemos se escapan de nuestras manos, no las podemos transformar o manejar como queramos, debemos dejarnos llevar e interpretar por lo que realmente percibimos en el momento que las notamos.
Hoy voy a relataros un caso entre tantos que me ocurrió hace muchos años, cuando lo leáis, interpretad vosotros mismos si lo ocurrido tiene que ver algo con un juego o con la Videncia.
Yo pasaba consulta presencial en un establecimiento cercano a un gran hospital, un día entra un señor que no conocía de nada, su cara mostraba mucha desconfianza y me dice que era un médico con alto cargo que no creía para nada en “esto”, pero que venía a la desesperada buscando ayuda, entonces yo le dije que no se preocupara que si lo que necesitaba estaba en mi mano yo le ayudaría.
Me cuenta que tiene una hija con 11 años y que desde hace más de un año tiene el problema de que a la niña se le cae muchísimo el cabello. Me explica que le han hecho todo tipo de pruebas, tratamientos… y que cada vez se le cae más, no encuentran diagnóstico ni él, ni ningún compañero, la niña lo está pasando muy mal porque tiene que llevar gorro siempre y le da vergüenza. Le pedí una foto de la niña ya que tenia una premonición y me la mostró, cogí la foto en mis manos, la mantuve durante 3 o 4 minutos (en ese momento tuve la visión de la niña impresionada viendo a su padre besándose con una mujer vestida con una bata blanca que no era su madre) y desde ese entonces, supe que yo no la podía ayudar. Debo decirle, a su hija sólo la puede ayudar Vd.
Muy extrañado y con cierta alteración me responde, ¡ya le he dicho que le hemos hecho muchas pruebas y que no tiene nada patológico, hemos agotado todas las vías ya no podemos hacer nada más!
Sin dudarlo ni un solo instante le dije: Vd. Mi adivinación es que mantiene una relación sentimental con una persona que no es su mujer, y le aseguro, que su hija le ha visto junto a esa mujer en una actitud que le ha llevado a un estado de “shock”, ese es el motivo por el cual la niña tiene el problema.
En un principio no salía de su asombro y unos minutos después me pidió disculpas por su actitud, admitió esa relación y me dijo si sabía algún modo de “curar” a su hija. Sí, claro que sí, debe realizar cualquier cosa que le demuestre a su hija que la relación que tiene Vd. con la otra persona va a desaparecer. Mientras la niña sepa que su padre mantiene otra relación no mejorará.
Me dijo que haría lo posible, al mes y medio vino a la consulta y me dijo que había dejado aquella relación, se había trasladado de centro de trabajo porque la persona que estaba con él era compañera suya y que habló con su hija del tema y se lo comunicó. A los cuatro meses la niña había mejorado mucho. Hoy por hoy y después de muchos años, sigo manteniendo contacto con Él, la niña está perfectamente.
Como os decía antes interpretad vosotros mismos La Videncia, pero nunca juguéis con ella.
Muchas Gracias. Un abrazo muy cordial de vuestra Vidente y Amiga. Carla
Compartir en:
Publicar comentario